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Protección de los prisioneros de guerra contra los insultos y la curiosidad pública

Published online by Cambridge University Press:  29 January 2010

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El derecho intemacional humanitario que rige el trato debido a los prisioneros de guerra está destinado a proteger casi todos los aspectos del bienestar humano, a fin de minimizar, en la medida de lo posible, los efectos adversos del cautiverio. Como observó el Tribunal Intemacional de Nuremberg:

«El cautiverio en la guerra no es venganza ni castigo, sino únicamente una custodia protectora, cuyo propósito es impedir que los prisioneros de guerra participen de nuevo en la guerra; es contrario a la traditión militar matar o herir a personas desvalidas».

Type
Prisioneros De Guerra
Copyright
Copyright © International Committee of the Red Cross 1993

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References

1 Sentencia (1947) 41 American Journal of Internacional Law, 172, 229Google Scholar.

2 Flory, William E. S., Prisoners of War: A Study in the Development of Internacional Law, 1942, Washington D. C, American Council on Public Affairs, p. 39Google Scholar.

3 En el artículo 4 del Reglamento anexo al Convenio de La Haya de 1907 sólo se dice «deben ser tratados con humanidad».

4 Flory añadió que al delegado alemán no satisfacía el Reglamento de La Haya, debido a que «la definición de ‘humanidad’ no es uniforme en todo el mundo».

5 El caso de Kurt Maelzer, War Crimes Reports 11 (1949) 53Google Scholar.

6 En Tokio, el Tribunal Militar Internacional condenó de manera parecida la práctica japonesa de «exhibir a prisioneros de guerra por las ciudades exponiéndolos al ridículo y a los insultos». Véase el UK Manual of Military Law. Part III, Londres, H.M.S.O., 1958, p. 51Google Scholar. Otro ejemplo de la Segunda Guerra Mundial —prisioneros aliados expuestos a la ira de la población local, y en este caso con resultados nefastos— fue el caso del linchamiento de Essen (Heyer and others, War Crimes Reports 1 (1947) 88). El capitán Heyer, un oficial alemán, dio la orden de que se escoltara a un grupo de tres oficiales aliados hasta una unidad de la Luftwaffe donde iban a ser interrogados. Ordenó a la escolta no interferir en caso de que personas civiles intentasen molestar a los prisioneros. Estas instrucciones se dieron en alta voz y de manera que un grupo de personas civiles allí presente pudiese oírlas. Cuando los prisioneros llegaron a una de las calles principales de Essen, fueron atacados por la muchedumbre y finalmente arrojados desde lo alto de un puente, lo que les causó la muerte. No obstante, en la acusación retenida contra el capitán Heyer y sus seis coacusados al ser juzgados por un tribunal militar británico, en diciembre de 1945, no parece haberse mencionado la exposición de los prisioneros a los insultos y a la curiosidad pública (hecho comprehensible, dado que los prisioneros muertos sufrieron consecuencias mucho peores), pero se alegó, en cambio, que «violando las leyes y costumbres de la guerra, [ ellos] eran responsables, junto con otras personas, de la muerte de tres aviadores británicos, prisioneros de guerra, no identificados.»

7 Véase, por ejemplo, The Times History of the War, coleccióon de la que se citan dos volúmenes en las notas 13 y 14 más adelante.

8 Por ejemplo, Korea — The First War We Lost, Alexander, Bevin, Hippocrene Books, Nueva York, 1986; en el reverso de p. 448Google Scholar se muestra a unos norteamericanos saliendo de una cueva para entregarse a los soldados de la China comunista. Otro ejemplo, citado por Levie, H. en The Falklands War (Arends, Coll a, eds.), Allen … Unwin, Boston, 1985, p. 72Google Scholar, es la fotografia muy difundida de los Royal Marines británicos rindiéndose en Puerto Argentino (Port Stanley), en la que se ve a algunos de ellos tumbados con la cara contra el suelo.

9 Por ejemplo, Best, S. H.The Story of The British Red Cross, Cassell … Co. Ltd., 1938Google Scholar; en la que la página opuesta a la 144 muestra a un oficial médico británico atendiendo a un turco herido tras la batalla de Tikrit, en noviembre de 1917.

10 Por ejemplo, The Longest War — The Iran-Iraq Military Conflict, Hiro, Dilip, Grafton Books, Londres, 1989Google Scholar, que incluye (después de la p. 136) una fotografía de prisioneros de guerra irakíes tomada en febrero de 1984.

11 Por ejemplo, At the Going Down of the Sun, Lindsay, Oliver, Hamish Hamilton, Londres, 1981Google Scholar, la página frente a la 152, que incluye una imagen de prisioneros de guerra aliados de camino hacia el campamento de Shamuipo, Hong-Kong, el 30 de diciembre de 1941, observados por soldados japoneses, cuatro dias después de la rendition de Hong-Kong.

12 Por ejemplo, en British Forces in the Korean War, dir. Cunningham-Boothe and Farrar, The British Korean Veterans Association, Leamington Spa, 1988, p. 132Google Scholar, se muestra a prisioneros chinos y de Corea del Norte capturados por soldados de la infantería de marina británica y retenidos a bordo del buque HMS Belfast.

13 Véase, por ejemplo, vol. VI de The Times History of the War, The Times, Londres, 1916, en cuya p. 262Google Scholar se ve a «prisioneros británicos trabajando — excavando trincheras en Alemania y preparando soportes de madera para las trincheras».

14 Véase, por ejemplo, vol. XII de The Times History of the War, The Times, Londres, 1917, en cuya p. 246Google Scholar se ve a «prisioneros de guerra británicos realizando tareas agrícolas».

15 Por ejemplo, Monty — The Field-Marshal — 1944–1976, Nigel Hamilton, Hamish Hamilton, Londres, 1986Google Scholar; en la página opuesta a la 420, se muestra al mariscal de campo Busch, comandante en jefe de los ejércitos alemanes que se habián rendido en el norte, siendo amonestado por el mariscal de campo Montgomery por no haber obedecido a las órdenes con celeridad.

16 Por ejemplo, The Illustrated History of the Vietnam War, Brian Beckett, Blandford Press, Poole, Dorset, 1985, en la p. 41Google Scholar, se muestra a soldados de la infantería de marina de Vietnam del Sur sometiendo «a un prisionero del Viet Cong a un interrogators in situ. La cabeza del prisionero es mantenida bajo el agua hasta que éste está a punto de ahogarse».

17 Por ejemplo, Beckett, op cit., en la p. 76, bajo el título de «E1 interrogators de un prisionero del NVA [ Ejército de Vietnam del Norte]. En una guerra brutal y sucia como la del Vietnam, se cometieron excesos en ambos bandos.»

18 Pictet, J., dir., Commentary on Geneva Convencion III of 1949, Ginebra, CICR, 1960, p. 141Google Scholar; se recuerda que el concepto del trato humano implica algo más que la ausencia de castigo corporal; supone una obligación firme «de defender [ al prisionero], de prestarle asistencia y apoyo, asi como de defenderle o protegerle contra heridas o peligros».

19 Véase, The Times, 13 de febrero de 1991.

20 Bien pudo haber sido éste el motivo del fotógrafo que tomó la fotografía de musulmanes bosnios en un campo de prisioneros dirigido por serbios-bosnios, fotografía publicada en el anuncio de Amnistía Intemacional en el periódico The Times del 19 de septiembre de 1992. Sin lugar a dudas, el motivo de su publicatión fue Amnistía Intemacional.

21 Véase, el capítulo de sobre, Hampson «Liability for War Crimes» en The Gulf War 1990–91 in Internacional and English Law (dir. Rowe), Routledge, Londres, 1993Google Scholar.

22 Véase, Hampson, op. cit.

23 El Protocolo adicional I a los Convenios de Ginebra de 1949 versa sobre los conflictos armados intemacionales, incluídas las guerras de Iiberación nacional (artículo 1.4), mientras que en el Protocolo II se tratan los conflictos armados no intemacionales —véase, asimismo, la nota de pie de página nº 27, relativa al artículo 3, común a los cuatro Convenios de Ginebra de 1949.

24 En el artículo 27 del IV Convenio de Ginebra de 1949, las personas civiles que se hallan en territories de las Partes contendientes y en territorios ocupados se benefician de una protectiín parecida a la mencionada en el artículo 13 del III Convenio.

25 The Times, 25 de enero de 1991.

26 Véase, el capítulo de Rowe sobre «Prisoners of War in the Gulf» en The Gulf War 1990–91 in Internacional and English Law (dir. Rowe), Roiltkdge, Londres, 1993Google Scholar.

27 Es interesante saber que, en relación con los conflictos armados no internacionales, en el artículo 3, común a los cuatro Convenios de Ginebra de 1949 se estipula un trato humano en todas las circunstancias y se prohíben «los atentados contra la dignidad personal, especialmente los tratos humillantes y degradantes» contra «las personas que no participen directamente en las hostilidades, incluso los miembros de las fuerzas armadas… puestas fuera de combate… por detention…». Por lo tanto, el análisis de la «humillación» ya se refiere a conflictos a los que se aplica el artículo 3 común.

28 La mención del artículo 13, el respeto de los términos de esta resoluciódn y el análisis de la «identificación individual» quizá estimulen a los medios informativos a familiarizarse con el derecho internacional humanitario en general.

29 Como ejemplo, cabe citar el hecho de que, en los últimos años, la Cruz Roja Británica ha organizado une serie de cursos, de medio díia de duratión cada uno, para la enseñanza del derecho internacional humanitario impartidos a periodistas de televisión en período de prácticas.