Las características clínicas del trastorno bipolar I (TBI) tienen importancia pronóstica y terapéutica. El propósito de este estudio era examinar el efecto de las variables demográficas y clínicas en el curso del TBI. Revisamos las notas clínicas de todos los pacientes con TBI (n = 63) que recibieron tratamiento en un servicio psiquiátrico de Londres durante un período de 1 mes. Los comienzos depresivo y maníaco eran igual de probables, sin ninguna diferencia de género. Cuanto más temprana era la edad de comienzo, más probable era que los pacientes experimentaran rasgos psicóticos. Sólo los comienzos depresivos predecían un número más alto de episodios de la misma polaridad. El género masculino y el abuso de sustancias se asociaban con una edad menor en la primera presentación, mientras que las mujeres con abuso de sustancias comórbido tenían más episodios maníacos. Los pacientes varones tenían más probabilidades de estar desempleados o ser solteros que las mujeres.

En un estudio anterior de 15 pacientes con trastorno de angustia, demostramos que los estímulos compuestos por palabras relacionadas con el cuerpo (somáticas) provocaban una onda lenta cortical positiva aumentada en comparación con los estímulos compuestos por palabras no somáticas. Los controles sanos no mostraron esta diferencia. El presente artículo informa sobre estimaciones psicométricas con relación a las ondas lentas corticales en estos pacientes. Después de alrededor de año y medio, se examinó de nuevo clínicamente a los pacientes. Aunque no se pudieron encontrar correlaciones significativas entre las medidas neurofisiológicas y psicométricas al comienzo del estudio, hubo una correlación significativa entre la mejoría durante el período de seguimiento y las medidas neurofisiológicas. Una disminución en la Escala de Ansiedad de Hamilton (HAMA), que demostró ser la mejor estimación de la mejoría, estaba asociada con la magnitud relativa de la onda lenta positiva provocada por los estímulos somáticos. Nuestros resultados apoyan los modelos cognitivos del trastorno de angustia, que hacen hincapié en que el procesamiento anómalo de los síntomas corporales está relacionado con el desarrollo del trastorno, su mantenimiento o ambos.