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El nuevo código de protección de la población civil y de los bienes civiles en los conflictos armados
Published online by Cambridge University Press: 29 January 2010
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Uno de los principios de base del derecho internacional aplicable en los conflictos armados es que, para con la población civil, integrada, por definición, por personas que no participan en las hostilidades, no esta permitido ningún acto de guerra.
Hasta la gran conflagración de los años 1939–1945, el derecho international no garantizaba prácticamente a la población civil una protección eficaz en caso de conflicto armado y no se proponía incluso tal objetivo, dado que la guerra se concebía entonces como una actividad estatal y que las personas civiles quedaban fuera de la lucha. Sin embargo, había principios y reglas generales, refrendados en diversos convenios internacionales, referentes, de una manera o de otra, tambien a la población civil.
El principio inscrito en la Declaración de San Petersburgo de 1868, según el cual «el único objetivo legítimo que los Estados deben fijarse en tiempo de guerra es el debilitamiento de las fuerzas militares del enemigo», se puede interpretar en el sentido de que los autores del documento pensaron en la protección de la población civil contra los riesgos de un conflicto armado.
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- Research Article
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- Copyright © International Committee of the Red Cross 1980
References
1 Doc. D.S. 4 a, b, 3, de la XXI Conferencia Internacional de la Cruz Roja, Estambul, septiembre de 1969: Reafirmación y desarrollo de las leyes y costumbres aplicables en los conflictos armados, Ginebra, mayo de 1969, pág. 76Google Scholar.
2 Revue internationale de la Croix-Rouge, septiembre de 1945, págs. 657–661Google Scholar.
3 Declarando que el genocidio, que en el transcurso de la historia ha causado muchas pérdidas a la humanidad, es un crimen de derecho internacional, cometido en tiempo de paz o en tiempo de guerra, el Convenio extiende la incriminación a los actos siguientes, cometidos con la intención de destruir entera o parcialmente: a un grupo nacional, ótnico, social o religioso; el homicidio contra miembros del grupo; el atentado grave contra su integridad física o mental; la sumisión intencional del grupo a condiciones de existencia conducentes a la destrucción fisica total o parcial; medidas tendentes a impedir los partos; el traslado forzoso de los niňos de un grupo a otro.
4 Como base del Convenio hay un proyecto elaborado por una conferencia de expertos gubemamentales, convocada en Ginebra en 1947; el proyecto fue sometido, en 1948, al examen de la XVII Conferencia Internacional de la Cruz Roja, en Estocolmo.
5 Este principio ha sido reafirmado, entre otros documentos, en la Resolución XXVIII de la XX Conferencia Intemacional de la Cruz Roja, así como en las Resoluciones 2444/XXIII y 2675/XXV de la Asamblea General de la ONU.
6 El esfuerzo de guerra se define como el conjunto de las actividades que, de cerca o de lejos, contribuyan a proseguir las hostilidades. La población civil puede participar en el esfuerzo de guerra sin perder, no obstante, el derecho a la protección.
7 Proyectos de Protocolos adicionales a los Convenios de Ginebra del 12 de agosto de 1949, Comentario, CICR, Ginebra, 1973, pág. 60Google Scholar.
8 Doc. D.S. 4 a, b, e: Reafirmación y desarrollo de las leyesy costumbres aplicables en los conflictos armados, Ginebra, 1969, pág. 80Google Scholar.
9 Ibidem. —Esta conclusión deduce el CICR en el artículo 6 del proyecto de reglas que limitan los riesgos que amenazan a la población civil en tiempo de guerra.
10 Conferencia de expertos gubernamentales sobre la reafirmacióon y el desarrollo del derecho internacional humanitario aplicable en los conflictos armados, segunda reunión, 3 de mayo – 3 de junto de 1972. Informe sobre los trabajos de la Conferencia, volumen II (Anexos), Ginebra, julio de 1972, pág. 7Google Scholar.
11 Tal definición de la población civil no figura en el Protocolo II, aunque la Conferencia debatió esa cuestión.
12 Este párrafo se formuló así: «Las disposiciones de la presente Sección se aplican a toda operación terrestre, aérea o naval que pueda afectar en tierra a la población civil, a las personas civiles y a los bienes civiles. Se aplican, además, a todos los ataques navales o aéreos contra objetivos en tierra, pero no afectan de otro modo a las reglas del derecho intemacional aplicables en los conflictos armados en el mar o en el aire».
13 El Reino Unido invocó el Protocolo de Londres, de 1936, en el cual se estipulaba la obligación para los submarinos de recoger a los pasajeros de navios mercantes naufragados.
14 La definición fue tomada por el CICR en el artóculo 43 del proyecto de Protocolo, con la siguiente formulación: «Para garantizar el respeto a la población civil, las Partes en conflicto limitarán sus operaciones a la destrucción o al debilitamiento del potencial militar del adversario y distinguirán entre población civil y combatientes y entre bienes civiles y objetivos militares». Doc. CDDH/1 del Comité Intemacional de la Cruz Roja. Proyectos de Protocolos adicionales a los Convenios de Ginebra del 12 de agosto de 1949.
15 Conferencia de expertos gubernamentales sobre la reafirmación y el desarrollo del derecho internacional humanitario aplicable en los conflictos armados (Ginebra, 24 de mayo-12 de junio de 1971), Informe sobre los trabajos de la Conferencia, CICR, Ginebra, agosto de 1971, pág. 90Google Scholar.
16 Ibidem, pág. 90.
17 Ibidem, pág. 90.
18 Doc. CE/COM.III/6, pág. 102.
19 Diversos textos de derecho internacional hacen alusión al término de objetivo militar, pero sin definirlo (véase el art. 8 del Convenio de La Haya del 14 de julio de 1954 sobre la protección de los bienes culturales en caso de conflicto armado y el art. 19 del IV Convenio de Ginebra del 12 de agosto de 1949 sobre la protección de la población civil en caso de guerra).
20 Véase Giraud, E., en Les problèmes que pose l'existence des armes de destruction massive et la distinction entre les objectifs militaires et non militaires en génúeral, Informe provisional presentado al Instituto de Derecho Internacional, quinta Comisión, Ginebra, 1964, pág. 30Google Scholar.
21 El témrino se refiere tanto a las operaciones militares propiamente dichas como a la producci6n de material de guerra.
22 Véase Schwartzenberger, Georg, en Les problèmes que pose…, op. cit., pág. 22Google Scholar.
23 Les problèmes que pose…, op. cit., pág. 22Google Scholar.
24 Un tal punto de vista es una inexactitud flagrante, pues los úinicos usos de un Estado no podrían ser derecho internacional consuetudinario. Para hacerse costumbre, el uso debe ser de larga duración, es decir reiterado, constante y general, o dicho de otra manera, practicado por otros Estados también. Además, debe basarse en un elemento subjectivo: la convicción pública general de que el derecho admite tal comportamiento de los Estados.
25 Giraud, E., op. cit., págs. 26–27Google Scholar.
26 Singh, Nagendra, Les problèmes que pose…, op. cit., pág. 26Google Scholar.
27 Doc. CE/COM 111/27.
28 Se trata, por una parte, de personas civiles que ejercen una función humanitaria —los miembros del personal sanitario civil, los miembros del personal de los servicios de protección civil— y, por otra parte, de personas protegidas por razó de su estado (edad, sexo, salud fisica o mental, funciones, etc.): niňos, mujeres, periodistas, personal de policia, del cuerpo de zapadores-bomberos, etc.
29 Las personas civiles Que participan directamente en las hostilidades no gozan de protección, mientras dure esa participación.
30 CE/COM.III/6; CE/COM.III/13.
31 Artículo 52, párrafo 1, del Protocolo I, titulado «Protección general de los bienes de carácter civil».
32 Los Países Bajos propusieron, ya en la Conferencia de La Haya de 1907, una regla en ese sentido, y la propuesta no fue aceptada.
33 En la concepción clásica eel derecho de la guerra, ocupatio bellica signiflcaba: que tenía un carácter efectivo; que no era translativa de soberaní; que suponía solamente la sustitución provisional y limitada de competencias. Para detalles, véase: Col. Gherghescu, Vasile y Cloşcăp, Dr. Ionel, Règles de droit international relatives a l'état de paix et à l'état de guerre. Ediciones Militares, Bucarest, 1972, págs. 229–232Google Scholar.
34 Vé la Carta de la ONU (artí 2, párrafo 4), la Declaració relativa a los principios del derecho internacional referentes a las relaciones amistosas y a la cooperación entre Estados (principio 1), la definición de agresió de 1977.
35 Las acciones de socorro para la población civil de un territorio ocupado se rigen por los articulos 59, 60, 61, 62, 108, 109, 110 y 111 del IV Convenio de Ginebra de 1949, así como por el artículo 71 del Protocolo I del 10 de junio de 1977.
36 Resolución 1515/XLVII/ECOSOC.
37 La Asamblea General de la ONU adoptó, en 1959, mediante la Resolución 1386/XIV, la «Declaración de los derechos del niño », para asegurar a todos los nños en todas las circunstancias una protección especial. La Declaración contiene diez principios que se dirigen a todos los responsables —padres, organizaciones de beneficencia, autoridades y Gobiernos—, que son invitados a reconocer los derechos del niño y a asegurar su aplicación.
38 Doc. A/8371 y Add. 1 a 3, incluido el Proyecto anexo de Protocolo relativo a la composici6n y a las funciones del Comité Intemacional Profesional para la salvaguarda de los periodistas en misiones peligrosas; Doc. A/8438 y Add. 1, que contiene un Anteproyecto de Convenio intemacional sobre la salvaguarda de los periodistas en misiones peligrosas; Doc. A/8371 y Add. 1, que contiene las observaciones generates sobre los respectivos documentos.
39 Doc. A/C 3/L 1902 (proyecto de convenio propuesto por Australia); Doc. A/C 3/L 1903 (documento de trabajo de los Estados Unidos); Resoluciones 1597 (L) del Consejo Económico y Social del 21 de mayo de 1971, por el cual el Consejo decidió transmitir a la Asamblea General un Anteproyecto de Convenio Interacional sobre la protección de los periodistas en misiones peligrosas.