Desde comienzos de 1958 hasta finales de 1970, los delegados del CICR efectuaron 992 visitas en unas 400 prisiones de 54 países, donde visitaron a un total de más de 100.000 detenidos políticos; 180 de esas visitas se efectuaron en situaciones de disturbios interiores y 812, en casos de tensión interna.

Ante tales cifras, se comprende que es imposible y que no tiene gran interés hacer una reseña histórica de cada caso; por lo demás, la mayoría de ellos todavía pertenece demasiado a la actualidad, y no lo bastante a la historia, para que se pueda hacer públicamente el correspondiente estudio, sin faltar al principio de discreción que el CICR siempre se ha impuesto.