Published online by Cambridge University Press: 05 September 2022
This article examines trajectories of nationalism in twentieth-century Argentina, Mexico, and Peru through the analytical lens of schooling. I argue that textbooks reveal state-sponsored conceptions of nationhood. In turn, the outlooks and practices of teachers provide a window for understanding how state ideologies were received, translated, and reworked within society. During the late nineteenth century, textbooks in Mexico, Argentina, and Peru conceived of the nation as a political community, emphasized civilization for having achieved national unity, and viewed elites as driving national history. During the twentieth century, textbooks eventually advanced a cultural understanding of the nation, envisioned national unity to be achieved through assimilation into a homogeneous national identity, and assigned historical agency to the masses. Yet teacher responses to the textbooks varied. In Mexico, under Lázaro Cárdenas (1934–1940), teachers predominantly embraced textbooks that promoted a popular national culture. Teachers in Argentina under Juan Perón (1946–1955) and in Peru under Juan Velasco (1968–1975) largely opposed the texts.
El presente artículo examina la trayectoria del nacionalismo en el siglo XX en Argentina, México y Perú, a través de la lente analítica de la enseñanza escolar. Argumento que los libros de texto revelan concepciones promovidas por el estado de lo que significa la nacionalidad. A su vez, las perspectivas y prácticas de los maestros nos ofrecen una ventana para comprender cómo las ideologías estatales fueron recibidas, apropiadas y retrabajadas por la sociedad. A finales del siglo XIX, los libros de texto en México, Argentina y Perú concebían a la nación como una comunidad política, enfatizaban el concepto de civilización como objetivo de la unidad nacional, y representaban a las élites como los motores que dirigían la historia nacional. Durante el siglo XX, los libros de texto proyectaron una concepción cultural de nación, visualizaron una unidad nacional que sería lograda a través de la asimilación dentro de una identidad nacional homogénea, y reasignaron la principal agencia histórica a las masas. Sin embargo, las respuestas magisteriales a esos cambios fueron diversas. En el México de Lázaro Cárdenas (1934–1940) los maestros adoptaron calurosamente los libros de texto que promovían una cultura popular nacional. En contraste, los maestros en Argentina bajo Juan Perón (1946–1955), y en Perú bajo Juan Velasco (1968–1975), se opusieron ampliamente a los nuevos textos.
I am grateful for the generous support of this research by the Social Science Research Council and the German Academic Exchange Service. I would like to especially thank James Mahoney, John Modell, Myriam Southwell, Fulya Apaydin, and the three anonymous LARR reviewers for their excellent comments and advice.