Los trastornos bipolares con frecuencia no se diagnostican hasta mucho después de su inicio, dejando a los pacientes sin tratamiento o con un tratamiento en consecuencia inadecuado. El curso del trastorno es aún más grave y las repercusiones negativas para los afectados, todavía mayores. Por tanto, se está dirigiendo un esfuerzo de investigación concertado a aprender cómo reconocer los trastornos bipolares en una fase temprana. Basándose en los resultados de la investigación actual, este artículo presenta consideraciones para una Escala de Síntomas Tempranos integradora con la que se pueda identificar a las personas en situación de riesgo e iniciar una intervención oportuna. Esto requerirá estudios prospectivos para determinar el poder predictivo de los factores de riesgo integrados en la escala.