Se evaluó subjetivamente la función sexual después del consumo de 3,4-metilenodioximetanfetamina (MDMA a “éxtasis”) en 35 usuarios recreativos sanos (20 hombres y 15 mujeres, 21-48 años de edad) con respecto a cuatro dominios importantes de la actividad sexual: el deseo, la erección (la lubricación en las mujeres), el orgasmo y la satisfacción. El MDMA aumentó de moderada a profundamente el deseo y la satisfacción en más del 90% de los sujetos. El orgasmo se retrasó, pero se percibió como más intenso. La erección estaba disminuida en el 40% de los hombres. Parece que el MDMA deteriora la ejecución sexual, a pesar del aumento del deseo sexual y la as percepción de mayor satisfacción.