Sobre la base documental de los inventarios post mortem se estudia la evolución del consumo de textiles —ajuar doméstico y vestuario— en una comarca rural de la actual Comunidad Autó;noma de Cantabria. Se constata un aumento continuado en el stock de textiles entre 1750 y 1860, y muy especialmente a lo largo de las cuatro primeras décadas del siglo XIX. Se endende el consumo de textiles, también, como una forma de relacionarse, de comunicarse, de tal manera que las posibilidades de cambios en las pautas de consumo se fundamentan, a la vez que en factores económicos, en la existencia de transfbrmaciones políticas, sociales y culturales.