Este trabajo discute las estrategias vinculadas al aprovechamiento de animales durante dos ocupaciones del sitio San Francisco Inca (puna transicional de Chaschuil, Catamarca, Argentina): una incaica (ca. siglos catorce y quince dC) y otra preincaica (ca. siglos diez a trece dC). Los grupos agropastoriles preincaicos que ocuparon estacionalmente el sitio desarrollaron una estrategia de diversificación, intensificación y almacenamiento de los recursos de origen animal para hacer frente a la impredecibilidad puneña y al contexto regional de restricción ambiental. Esta incluyó la caza de vicuñas, la tendencia a evitar el sacrificio de llamas durante dicha ocupación, el procesamiento relativamente intensivo de partes de bajo retorno de los camélidos, el secado de elementos del esqueleto axial y, posiblemente, el consumo diferido de la médula ósea de los metapodios. Durante la ocupación incaica, el Estado organizó festines para legitimar su presencia en la región y sirvió comidas basadas fundamentalmente en los recursos brindados por animales silvestres capturados localmente (vicuñas y, en menor proporción, roedores, aves y guanacos). Además, se plantea la posibilidad de que en dichos eventos festivos se hayan realizado sacrificios de llamas y producido carne seca para su consumo diferido en otros pisos altitudinales o para el intercambio.