Se describe un caso en el que la fototerapia puso fin rápidamente a las perturbaciones del ciclo sueño-vigilia y a los síntomas concurrentes de delirium en un paciente que no respondía al tratamiento convencional con haloperidol. La causa del estado delirante en este caso puede haber sido un cambio en el metabolismo como resultado de la sepsis. La exposición del paciente a 8.000 Lux durante 1,5 h durante 5 días consecutivos fue suficiente para suprimir todos los síntomas delirantes y normalizar el sueño. Este resultado puede estimular el diseño de estudios sistemáticos para examinar la extensión de la desincronización entre diversos ciclos rítmicos en el delirium y el valor de la fototerapia para el restablecimiento del ritmo circadiano normal.